viernes, 7 de septiembre de 2007

XLIV

Viernes 7 de Septiembre
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FE DE ERRATAS

Se lamenta informar al lector de este auspicioso y quien sabe si voluminoso acontecimiento, que se han producido fallas en el sistema y caos metodológico.

Pese a los enunciados escuchados, como sentencias inamovibles, de ciertos científicos y teóricos del Pasado, que mitigan la capacidad de error en sus obras; se declara, con la mayor de las alegrías metódicas, lo siguiente:

Allí, donde se daba inicio a la Brecha, en el parágrafo XXVII (*), se abrió junto con la posible excavación, una confusión numérica la cual contraria a su función de esclarecimeinto, llevó a la confusión a ciertos personajes de la trama, que huyeron inevitablemente en el caos del mismo narrador desorientado.

De este modo, únicamente fueron consebidas, desde aquel momento, pocos fragemntes realmente ocupantes de aquella fosa que se pretendía develar, sacando a flote lo Pasado, y resucitándolo con el aire del Recuerdo, y de lo trascendental.
Estos únicos trozos realemente regurgitados por la faringe del Yo, no son otros que aquellos indicados, apartir de ahora con doble asterisco **.

Aclarado entonces este caso, se detecta qeu los demás fragmentos que contenían la numeración con asterisco, fue simplemente por torpeza metódica.

Se anticipa también que no ha quedado terminada la Brecha, siendo consciente ya el investigador, que prontamente se dará continuación a tal arqueológica búsqueda de lo dejado en algúin sitio, ya encontrado hace tiempo.

Para la completa aclaración del Caos, se explica que,una vez devenidos los sucesos de la semana pasada, no se piensa sino en la competa libertad empírica y fáctica de los próximos acotecimientos.
Sin embargo, la coyuntura formológica ejerce la presión, requerida eminentemente, de señalar que en el lapso de la duda acaecida en la trama de el Todo, se originó una superposición numérica de ideas y fragmentos disímiles, algunso dejados en la base material existente, sin salir a flote.
Este hecho derivó en que sea necesario una neuva señalización en algunos fragmentos que figuran numéricamente dos veces, por confusión temporal de su ubicación abstracta en la investigación.
Algunos afirman haberlos visto salir desde lo oculto del foso brechal, mientras otros no hacían más que dirigir su brazo hacia lo alto de una montaña, indicando el verdadero origen de aquellos conjuntos de palabras.
-De la montaña, Sr...de allí bajaron.
Se señalizarán, entonces, con un 'Bis' en su título y un encabezado propio de su día.


XXXII*

Una sensación de palpito a futuro, de continuo y progresivo paso por la secuencia de una oruga desorbitada, allí donde los cánones desenmazcaran todo tipo de alimañas con fines de pura práctica de devenir constante.

Una sensación de palpito a futuro, en disonancia con lo presente, siempre guardado en su habítaculo de olvido, proyectando constantemente la presunta causa de todo.

Una sensación de palpito a futuro, con inestables condiciones para la mañana, variando por la tarde y desfigurandose de noche, junto con la utopía de la búsqueda de una uto´pia a seguir, sin la dislexia de quien corre, a su encuentro, en larga avenida de la costa, sin palabras en la mano y, entre su labio superior y el pequeño agujero dibujado por esta deformación en su mejilla izquierda, un mínimo gesto en la cara.

Una sensación de palpito a futuro,
como la muerte…
del escritor…
y su obra…
el olvido…

XXXI C*

Inmerso en este cometido, persigue con ahínco aquellos intersticios donde peudo hallar el consuelo perpetuo del duelo emprendido por haber iniciado un tránsito por la delgada línea del autorespeto escindido al Yo.

Así, descubre la forma para extirpar un futuro vacío que encontrará, tal vez, mi vida al desaparecer aquel cuya semilla fue parte constitutiva de mí. Con el indicado respeto y aprecio, cualidades que abrazan y visten fríamente al propio Temor, planifico un homenaje a la persona de mi abuelo, del siguiente modo:


“La melancolía capturada por la inmaterialización de una imagen fílmica de mi abuelo”

1- Proyectar en cine fragmento del corto con mi abuelo; PP.
2- Filmarlo y enviar la señal a la cola de emisión del proyector.
3- Etc, hasta su descomposición.
4- Resetear desde el principio.

XXXI B*

La incidencia del Objeto en el Sujeto, disimulada en los intersticios de la escritura, produce también la erosión de todo concepto de inmutabilidad a desarrollar en la investigación, a excepción de la puissance del lector.

Mientras suena la Sonata III de Claude Debussy.

Un efecto a modo de ejemplo y advertencia, dos categorías que debieran obligar a un cambio de tono y mirada en aquel audaz locutor que osara usarlas juntamente; es aquella coerción, a seguir como variable durante el trabajo, ejercida sobre el sujeto por la soberbia implícita en la pretensión de dicho estudio.

El Sujeto convertido en si mismo en Objeto.